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GUÍA DE VIAJE COMPLETA DE IRLANDA. Irlanda en Coche.

Turismo Irlanda

Tras 9 días por Irlanda visitando en coche muchos de los puntos más representativos de este precioso y verde país, os dejo las impresiones de un viaje rodado.

¿Qué hay que ver en Irlanda?, ¿qué no te puedes perder?, intentaré dejaros mi opinión lejos de lo típico que circula por Internet. Aunque la verdad que Irlanda es muy sencilla de ver y como podréis observar, las opciones de lugares imprescindibles son claras.

Lo mejor de la República de Irlanda:

  1. Islas Skellig Michael.
  2. Acantilados de Moher (Cliffs of Moher).
  3. Compartir Guinness en pubs con música en directo.
  4. Dublín.
  5. Las noches en Kilkenny.
  6. La Península de Dingle.
  7. La ciudad de Killarney y su parque nacional.
  8. El anillo de Kerry (King of Kerry).

Lo peor del viaje:

  1. No hubo tiempo de ver las Islas Aran, un lugar imprescindible de visitar.
  2. Mala señalización en las carreteras, dependes del GPS y de los irlandeses.
  3. Llueve mucho, pero por suerte no nos llovió durante mucho tiempo seguido, por lo menos en Julio.
  4. Las carreteras no son tan malas como dicen, pero son muy mejorables.
  5. En general, la calidad de los restaurantes no es buena, excepto en Dublín.
  6. La comida es realmente cara, los 3€ de una garrafa de 5 litros de agua o los 2€ de un litro de leche, impactan.
  7. Las compras para regalar son decepcionantes en cualquier ciudad.

Las carreteras.

La única forma para ver toda Irlanda en condiciones es alquilando un coche. Durante mi búsqueda por Internet y tras consultar a amigos, todos me decían lo mismo: las carreteras son nefastas, y buenas no son, pero la experiencia fue muy agradable y el conducir durante tantos kilómetros, por la izquierda, dejando parajes tan espectaculares merece mucho la pena.

Excepto en lugares donde el pavimento estaba agrietado, las carreteras no son malas, en muchas zonas son estrechas, pero en ningún momento en nuestro camino nos encontramos con nada tremendamente raro, sino todo lo contrario, el pavimento y el serpenteado fue correcto como en cualquier zona rural en España.

La gasolina es un 15-20% más cara que en España y está plagado de gasolineras, aunque casi ninguna 24horas.
Irlanda está lleno de glorietas y pasos de cebra elevados y sí recomiendo que el coche tenga más CV de lo normal, porque hay zonas con grandes cuestas y en general, la conducción no es para iniciados. Por ejemplo conducir en Dublín con un GPS como mi Tomtom que le da a veces por señalizarme a vías de sentido contrario, puede llegar a ser una odisea. Dentro de las ciudades es normal pagar por aparcar y en Dublín dejar el coche aparcado todo el día supone un gasto descomunal.

La señalización en carretera no es buena y conducir por la izquierda puede resultar complicado si lo haces de forma instintiva, tienes que acordarte en cada momento en cada salida a la carretera que es por la izquierda, sino lo haremos siempre por la derecha, por lo menos el primer día. Los Irlandeses conducen muy bien en general y las carreteras tienen el 100km/h de límite de velocidad casi siempre siendo difícil superarlo, no por el estado de las carreteras, sino más bien por la cantidad de curvas. Las glorietas también van en el sentido contrario de las agujas del reloj y te acostumbras rápido, el segundo día ya eres un irlandés más al volante, y por si acaso, hay señales en toda Irlanda para recordar al conductor que se debe circular por la izquierda y en ciudades, el peatón al cruzar, debe mirar a la derecha.

La hospitabilidad irlandesa. El idioma.

Mucho se habla de los irlandeses, se asegura que en Irlanda la gente es muy acogedora y hospitalaria, y se atreven incluso a ponerse primeros en Europa y seguramente no les falte razón. Son tremendamente extrovertidos, no sólo en los pubs, por la calle, en cualquier lado puedes encontrarte con una conversación con un irlandés. Realmente son buena gente.

Pero no todo es bueno, en prácticamente todos los hoteles, la hospitabilidad sin ser mala, no era ni mucho menos lo esperado en Irlanda, es curioso como en un B&B, cuyo dueño nos atendió durante nuestra estancia en su casa, se comportó mucho mejor que cualquier persona que trabajaba de cara al público en hoteles, estoy hablando en general porque ya el colmo fue en Moher, donde la persona que se dedicaba a vender los tickets de parking nos trató de muy malos modos, nunca me había pasado nada parecido y justo pasó en Irlanda y en una de las atracciones más importantes del país, por lo que no es muy de entender en un país que venden a bombo y platillo que te sentirás como en casa.

Respecto al idioma, no esperéis que un irlandés os hable en español ni en lugares públicos y se les entiende bastante bien excepto (por lo menos en mi caso) en Dublín.

Alojamiento en Irlanda.

En general muy bien, incluyendo casi siempre un desayuno atronador para empezar el día de la mejor forma posible, con diferencia, el país donde mejor se cuida este aspecto. Las habitaciones siempre enormes y acompañadas también de máquina para hacer té o café y plancha. Las habitaciones double con una cama de matrimonio también se acompañan casi siempre de otra pequeña cama, por lo que se convierte en una doble por el mismo precio, aunque sigue siendo es más caro de lo normal. Las B&B son también gran opción, quizás mejor, pero me resultó más rápido y sencillo reservar desde Internet, entre otros detalles en una B&B difícilmente tendrán lector de tarjetas de crédito, lo que nos obligaría a tener mucho cash encima.

Podéis encontrar alojamiento muy barato desde estas dos páginas: Hotels y Booking.

 

Gastronomía en Irlanda.

¿Qué tal se come en Irlanda?, la verdad es que esperaba muchísimo más porque termino los días en este país bastante desilusionado. Los desayunos típicos irlandeses se componen de un plato con un huevo frito con panceta, unas salchichas excelentes, tanto como los dos trocitos de morcilla (pudding) blanca y negra y medio tomate.
Irlanda se caracteriza por tener mucha costa, por lo que es muy habitual el marisco y en especial, las ostras, las cuales no dejan de ser iguales o peores a la media.

Los dos ingredientes fundamentales en la cultura gastronómica de Irlanda son la patata y la col, en varias ocasiones acompañaban los platos con un pequeño platito con pequeñas patatas enteras cocidas, sin más. En otras, se acompañaba directamente de guisantes, y tal cocina podrá ser muy sana, pero al igual que me pasó en China, es tremendamente sosa, con lo buenas que están las patatas asadas… con aceite de oliva y sal!.
Por otro lado, varias veces me encontré con carnes poco comestibles, hecho que difícilmente podría pasar en España, porque la carne podrá ser mejor o peor, pero pocas veces está por ejemplo dura. Lo que sí suelen hacer muy bien son los estofados, siendo muy recomendable el clásico Irish Beef Stew.
El pescado suele ser bueno, pero los típicos Fish & Chips (pescado rebozado con patatas y salsa para untar), pienso que no tiene nada que ver con nuestra cultura del comer, personalmente no lo vi gran cosa.

Lugares de comida basura hay muchísimos, hamburguesas, pizzas, kebabs, … muchas las opciones y muy buen resultado. Y por último, ya que no todo es malo, en Dublín sí se come muy muy bien, casi en cualquier restaurante de la ciudad. Restaurantes de todo tipo y no sólo en el centro, con menús suculentos a bajo precio.

Los pueblos.

Visto uno, vistos todos. Todos muy parecidos, con una calle principal que parte el pueblo en dos, siendo en muchos casos pueblos muy pequeños en donde prácticamente sólo existe esa calle, una main street con las típicas casitas de colores llamativas donde si algo destacan son los pubs o bares, que como en España, hay por todos lados.
Tampoco son todos los pueblos bonitos, quizás dentro de los que más me gustaron se encuentran: Killkenny, Killarney y Galway.

Los Pubs Irlandeses.

Está claro que nos llevan ventaja, porque en España existen muchos pubs que intentan imitar a los típicos irlandeses con poca fortuna. En Irlanda cualquier sitio, ya sea bar, pub o restaurante tiene su encanto. En ellos destaca por encima de todo el hervidero de voces, los irlandeses hablan mucho y son muy generosos. Y como no, no pueden faltar las pintas de Guinness, aunque no era la única acompañándose casi siempre con grifos de Heineken y Carlsberg, con otras cervezas irlandesas como la Murphy's, Kilkenny y Harp. También era muy común las colecciones de cualquier cosa que decoraban los garitos, ya sean sellos, bufandas, billetes, … de todo.

La cerveza Guinness.

Toda una institución en Irlanda, la cerveza Guinness está considerada en el mundo como una de las cervezas más importantes. Sorprende al paladar lo suave y lo bien que entra, fácilmente puedes tomarte 3 pintas seguidas y en mi caso, apenas notaba gran cosa cuando después tuve que conducir. Es una cerveza negra, también llamada stout, y se sirve en dos tiempos, en el primero se llena hasta que falte dos dedos por la parte alta de la copa y hasta que la cerveza no reposa, no se termina de llenar, reposo que puede llegar a 2-4 minutos, y en el cual se ve descender el marrón de la cerveza y es todo un espectáculo, el paso que queda arriba también es muy característico, y en el cuál podrías dejar una moneda y no caería al fondo.

De compras por Irlanda. Precios.

¿Qué hay típico en Irlanda para regalar?, los productos típicos o souvenirs de Irlanda no son muchos. Por un lado en artesanía destaca la lana, destacando por encima la producida en las islas Aran, con sus jerseys.
Por otro lado es la cuna de la cerveza Guinness y del whiskey Jameson o Bushmills, por lo que también puedes hacer compras relacionadas, incluso directamente desde sus fábricas, que se pueden visitar como cualquier monumento turístico.
El cristal que se produce en la ciudad de Waterford también es muy famoso. Y por último existen tiendas de souvenirs en cada esquina de Irlanda y son prácticamente todas iguales en todas las ciudades, con ropa, productos Guinness, y demás abalorios típicos y en general, Irlanda es un mal país para regalar, las compras no son nada interesantes y no ofrecen nada de lo que traerte a tu país para ofrecer algo bonito y distinto.
Lo único interesante que vi fue en el mercado del Temple Bar en Dublín, muchos productos como queso extraordinario, aunque bastante caro en general.

Pero si algo se puede destacar en Irlanda son las postales de todo tipo, no existe tienda sin postales o cartitas con mensaje, hay incluso tiendas que sólo venden estos papelitos de amor, felicitación, aniversario, etc.

Para productos de diario, es importante que si vas comprando comida lo hagas en supermercados grandes como EuroSpar (más supermercado que los clásicos Spar) o Lidl, que hay menos pero los precios son siempre más bajos, otra opción es los supermercados tipo El Corte Inglés son las Dunnes Stores que suelen estar en las ciudades más grandes. En pequeños comercios y gasolineras los precios se incrementan prácticamente al doble en muchos productos.

El Festival Oxegen.

Es el festival de música de las botas de agua y el barro. Se realiza muy cerca de Nass, a algo menos de una hora en coche a Dublín, estando muy bien señalizado en coche.
Como durante los 3 días de festival es muy probable que llueva, cuando lo hace, toda la extensión de parque se convierte en una auténtica pista de barro, y son comunes las guerras y gente rociada en marrón por todas las partes.

El Oxegen tiene una extensión descomunal, por ejemplo tras aparcar el coche tendremos que andar durante 20 minutos para poder entrar al complejo dejando las tiendas de campaña a los lados y una vez allí, son varias los conciertos simultáneos de todo tipo de música, destacando el pop y rock. La organización es bastante buena, y hay personal cada pocos metros.
Como punto negativo sin contar con el barro, son los precios de la comida, ya que por ejemplo un slide de pizza cuesta 5€ y una hamburguesa sencilla 6€, sin contar bebida, por supuesto. Pero todo no es malo y el festival merece mucho la pena porque la gente, en su mayoría Irlandeses, es muy pero que muy extrovertida y cachonda y fácilmente acabarás hablando con todos. Otra gran ventaja es lo fácil que es colocarse en las primeras filas de cualquier concierto sólo con llegar 5 minutos antes de su casi siempre, puntual empiece. El sonido no es espectacular, pero si el cartel acompaña, es un festival muy interesante.

Últimos apuntes y consejos interesantes.
Por si acaso, si puedes, acompaña tu cartera con una tarjeta con microchip, en algunos lugares no podrás pagar sin ella.

Iré escribiendo poco a poco guías de todo lo que visité empezando por lo mejor: Las islas Skelling.

› Documento creado en Julio del 2009
Por Javier Rioja

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